Monday, September 6, 2010

Otavalo

Ayer sábado hicimos nuestra primera excursión fuera de la ciudad. El destino escogido fue Otavalo, un pueblo que está a menos de 90 km de aquí, tomando la Autopista Panamericana hacia el norte. 


Decir que la Autopista Panamericana de "autopista" lo único que tiene son los peajes (dos en todo nuestro recorrido, por un importe total de un dólar y sesenta centavos) como se puede ver en la foto de arriba. Señalar también que la doble línea amarilla en el centro de la calzada, aquí no significa "prohibidísimo adelantar" sino más bien "adelantar con cuidadiño". Son tan comunes los adelantamientos a lo loco que los coches que vienen en el sentido contrario no pitan ni se cabrean, sino que se limitan a echarse hacia el arcén para que quepan los tres coches en la calzada. También se ven adelantamientos dobles a menudo. Y no me refiero a lo de adelantar dos coches a la vez (eso no es nada, lo suyo es adelantar un camión, una furgoneta, un autobús y tres coches de una tacada), sino el que cuando tú estás adelantando a un coche de repente miras a tu izquierda y ves que hay otro coche adelantándote a ti.



Bueno, suficiente sobre la Panamericana. Hicimos dos horas de camino recorriendo paisajes increíbles. Pensaba que no iban a salir las fotos desde el coche así que apenas hice ninguna. Pasamos del Hemisferio Sur al Hemisferio Norte, atisbamos un volcán altísimo totalmente cubierto de nieve (y prácticamente de nubes), vimos barrancos sin fondo y cuando parecía que estábamos en el valle, de repente aún veías otro barranco surcándolo. Continuamente veíamos desniveles impresionantes, de más de 1500 m, tanto hacia arriba como hacia abajo.



Al llegar a este lago sabíamos que ya estábamos cerquita de Otavalo. La atracción de Otavalo los sábados es el mercado de artesanías que ponen en una de sus plazas y que se extiende por varias calles a su alrededor. Es como el rastro de Madrid, pero mucho más colorido -y debo decir que con un poco menos de gente, lo que es de agradecer. ¡¡¡Este mercado es el paraíso de los pantalones yonkis!!! Tienen absolutamente todos los colores y toditísimas las tallas. También chaquetas, ponchos, zapatillas de andar por casa de todos los colores del arco iris. Y bandejas, cuencos, láminas pintadas... ...en fin, todo lo que un mercado de artesanías que se precie tiene. No hicimos fotos para no llamar la atención sobre nosotros -y convertirnos en objetivo de ladronzuelos- pero buscando en google no faltan imágenes. 

Después de una hora dando vueltas y gastándonos los dineros nos metimos en un sitio a comer. El menú del día costaba un dólar con 75 centavos, pero decidimos comer a la carta: dos platos combinados y dos bebidas por 6 dólares. ¡Así da gusto salir de casa! Casi me costaron más caras las chuches que compramos de camino al coche, dólar y medio por seis míseras gominolas... pues eso, casi lo mismo que el menú del día. Y después de darle de comer a Matteo en el coche, fuimos rumbo a la laguna de Cuicocha pasando por Cotacachi. Viajando con un bebé hay que optimizar tiempo, así que lo de parar en Cotacachi lo dejamos para otro día. En este pueblo se dedican a trabajar el cuero, y prácticamente todas las tiendas son de ropa, zapatos u otros artículos de cuero. 


La laguna de Cuicocha está en una reserva natural, a los pies del volcán Cuicocha. Su origen es una chimenea de una de las erupciones del volcán. En el centro de interpretación hay una representación muy clara de cómo se formó -así como del origen de los dos islotes que tiene en el centro, fruto de la solidificación de la última lava que salió de la chimenea. 



Al parecer hay una ruta que da la vuelta a la laguna, y que nos quedamos con ganas de hacer, pero no era el día más apropiado para ello ya que el coche estaba lleno de cosas, no llevábamos calzado adecuado, estaba empezando a llover y además Matteo nos dijo que era hora de ir volviendo a casa. ¿Que cómo nos lo dijo???? Pues de la única forma que sabe el pobre...


Así que hicimos una última foto y emprendimos el camino de vuelta a casa -aunque quedan pendientes varias visitas más a hacer todas las cosas que nos dejamos por hacer.


8 comments:

  1. ala!!!! q de colores!!!! jooooo!!! yo kiero!!!!!!!!! q pasada!!!!!

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  2. Como mola,vaya parages mas maravillosos y no culpeis a Matteo,que os quedan dias de sobra para recorrer esos parages de tanto colorido.
    Un beso a los tres.

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  3. ...bueno, como dices y nos queda muy claro, ya vemos que a Matteo no le gustó en absoluto...

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  4. ...y eso que llevaba su chaquetita nueva...

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  5. Lo dicho, ya sabeis dónde estamos!!!

    Nell, has empezado ya el cerdito??

    Ah, y a Matteo le gusto todo, pero al FINAL estaba cansadete... casualmente cuando le pusimos su chaqueta nueva jejeeje

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  6. Bueno, como te dije, ya la he echado un vistazo a tu blog. Estupendo, así estaremos pendientes de cómo marcha vuestra vida y será una forma de "convivir" con vosotros. Yo iré pasando todos los posts a la comunidad, porque seguro que estarán felices de ir siguiendo vuestra vida en Quito. Les daré la dirección también.
    ¡No dejes de escribir! no te hagas perezosa. Además escribir te vendrá muy bien.
    Un besote muy grande para los tres.
    Aunque aparezca como anónimo soy Juan.

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  7. ¡Gracias Juan! Efectivamente, aquí vais a poder seguir un poco nuestras aventurillas :-) A ver si logro trasmitiros al menos un poquito la belleza de este país que nos está enamorando.

    ¡Muchos besos!

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  8. gracias x visitar ecuador

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